domingo, 11 de octubre de 2009

"El vampiro de la gruta" (Decimoséptima Entrega)


"- Luego de varios días de viaje, en parte debido a las inevitables paradas para calmar la insaciable sed de sangre del príncipe llegamos a Vienna, entonces la capital del reino de Matthias Corvinus.
El príncipe Vlad había sido prisionero del rey húngaro, pero debido a las simpatías que se había ganado entre otros líderes cristianos europeos por su fervorosa campaña contra los otomanos, Corvinus no solo debió liberarlo sino que además le permitió contraer matrimonio con su prima Ilona. El rey apenas toleraba al príncipe de Valaquia y debió haberse sentido aliviado cuando este partió de su forzada estadía en Hungría a reconquistar sus propios dominios de manos de los turcos. La noticia sobre la muerte de Vlad Draculea ya había llegado a Vienna y a pesar de su antipatía por mi señor, Corvinus lamentaba su desaparición aunque estrictamente en términos políticos y estratégicos. Obviamente que todo esto me había sido explicado por el príncipe, ya que por ese entonces yo solo era un simple soldado sin conocimiento alguno en estos temas.

Esa misma noche, mi señor partió para saciar su sed y luego para hacerle una visita al rey. Nos habíamos instalado en una residencia dentro de los muros de la ciudad y yo me quede protegiendo el lugar de descanso del príncipe. Me encontraba agotado por el largo viaje por lo que inevitablemente no tarde en quedarme dormido.
Me desperté sobresaltado por un ruido; Draculea había regresado y se encontraba furioso."

'- Ese maldito cobarde! Mercader de favores políticos! Cobarde gusano!' gritaba el príncipe.

'- Que ha sucedido mi señor?'

'- Que ha sucedido? Pues que ese estupido pretencioso casi se muere del espanto al verme aparecer en sus habitaciones y una vez que se repuso comenzó a llamar a los gritos a sus mercenarios. Tuve que despacharme a varios de ellos y ni modo de lograr hacer entrar en razones a Corvinus. Mi salida de su palacio no fue nada digna, he de reconocer, pero tampoco podía quedarme y esperar que toda la guarnición se me echara encima. Definitivamente no podremos contar con la ayuda de esa rata traidora!'

"Pasaron los días y se había establecido una rutina que casi de inmediato comenzó a resultarme insoportable. Mi príncipe salía todas las noches en busca de la preciada y necesitada sangre y yo cuidaba casi todo el tiempo del lugar, a excepción de unos momentos luego del amanecer en los que salía a la ciudad en busca de alimentos para mi persona. Cuando Draculea regresaba de sus excursiones nocturnas, si estaba de buen humor, charlábamos largamente hasta que se aproximaba el alba. Mi señor era extremadamente culto y me resultaba un placer escucharlo debatir sobre los más variados temas. Como dije, yo era simplemente un soldado pero al oír de boca del príncipe las maravillas que albergaba el mundo, un deseo irrefrenable comenzó a crecer en mi interior. Quería explorar la infinita cantidad de tesoros que la humanidad me ofrecía, más allá del umbral de la que se había convertido en una cárcel para mí. Tenia sed de conocimiento, una sed que se hacia mas acuciante con el paso de los días.

Yo conocía los estados de ánimo de mi señor y una noche que este se encontraba de buenas, probablemente por haber hecho su victima a alguna hermosa joven, me decidí a hablarle. Los sentidos de percepción dignos de un depredador del príncipe le hicieron que se me adelantase.

'– En que estas pensando mi fiel Boris? A pesar de que tratas de parecer el de siempre, tu mente esta distraída en pensamientos verdaderamente profundos. Puedo sentirlo, como puedo sentir como se acelera tu corazón mientras te digo esto.'

'- Es cierto mi señor, no podría ocultárselo por mas que quisiera. Tengo una incertidumbre muy grande. Que nos depara el futuro?'

'- A que te refieres Boris?' Su astuta mirada trataba de penetrar mi ser mas intimo. Normalmente me hubiera sentido intimidado, pero mi mente estaba guiada por ese deseo que se había enquistado irreversiblemente en mi ser. Sentía que no había vuelta atrás. Quería la libertad!

'- Mi señor, le suplico humildemente que me releve de las tareas presentes!'

'- Pero Boris, sabes que eres la única persona en este mundo en la que puedo confiar para tal tarea!'

'- Lo se mi príncipe. Yo soy un simple soldado y siempre me sentí orgulloso de cumplir con mis tareas como tal, pero ahora no siento lo mismo. Me siento honrado de servir bajo sus ordenes, de haber combatido a su lado a los herejes otomanos, pero…'

'- Pero?'

'- Pero gracias a usted ahora se que el mundo es tan vasto que quisiera conocerlo, que quisiera disfrutar de todas sus maravillas, de todos los conocimientos que encierra!'

Se me quedo mirando fijamente. Yo esperaba una de sus típicas explosiones de furia. Pero no. Me sorprendió con una mirada llena de humanidad y compasión, cualidades que pocas veces había visto yo en este hombre duro y cruel. Y ahora que ni siquiera era un hombre si no un demonio en busca de venganza, lleno de resentimiento por sentirse abandonado por la fe que defendió con tanto fervor, me miraba con satisfacción sana. O éso yo creía.

'- Boris, mi querido Boris. Creo que después de todo tendré arreglármelas sin ti! Pero mis razones son egoístas. Te concederé lo que me pides. Pero te concederé mas aun, te obsequiare el medio para que el mundo no te mezquine todo lo que deseas. Te obsequiare, la inmortalidad!'

Estas últimas palabras sonaron a mis espaldas. Sentí como sus colmillos se clavaban en mi carne. Y luego, la noche eterna me cubrió con su manto."


Me levante de la silla y comencé a estirarme. Hacia ya rato que el extranjero había iniciado su relato pero lo vertiginoso e increíble de los eventos que relataba, me hacían parecer que solo habían transcurrido minutos.Boris Mussat también se levanto y comenzó a caminar pausadamente con las manos a sus espaldas.

"- Entonces así fue como se convirtió en… un vampiro?"

"- Así es mi joven amigo."

"- Y cuando dice que sucedió esto?"

"- En el año 1476. Hace ya largo tiempo."

"- Y que ha hecho desde entonces?"

"- Inicialmente lo que me había propuesto. Viaje mucho ciertamente. Primero las grandes capitales europeas. Aprendí las lenguas más importantes para poder estudiar y comprender a la humanidad en profundidad. He pasado incontables noches en los más importantes museos y bibliotecas de Europa. Eso me llevo inevitablemente a otros lugares, otros continentes. Admiré y estudié todas las culturas y civilizaciones desde Europa, hasta el Medio Oriente y Asia.No pude evitar volver a Vienna en un momento crucial; en el año 1683 Suleyman El Magnifico fue derrotado a las puertas de la ciudad. Luego de 300 años de combates entre los reinos centro europeos y el imperio otomano, pude regocijarme viendo a los turcos ser expulsados de mi antigua patria."

"- Y Draculea? Aun se encontraba en Vienna? Volvió a verlo?"

"- Lo intente. Pero por más que me esforcé no me fue posible encontrarlo. Pero si me encontré con su prole. Lamentablemente debo decir que no eran dignos del regalo de la inmortalidad. Unos salvajes tan solo preocupados por los festines de sangre y placeres mundanos. Escuché tan solo habladurías respecto al paradero del príncipe, pero nadie parecía tener contacto con el o haberlo visto en tiempos recientes. A pesar de que me encontraba entre los de mi propia especie, no me sentía cómodo en absoluto en su compañía. Tal vez era que todo obedecía al plan original de mi señor y su intención de vengarse contra el Todopoderoso, convirtiendo a sus criaturas en bestias sedientas de sangre y no en otra cosa.

Volví a Paris donde convertí a algunos miembros de la realeza, en un ilusorio intento de tener a algunos de mi especie con quienes compartir todo lo que yo había descubierto, todos los conocimientos que había acumulado. Pero la indolente nobleza tenia ya mas en común con los vampiros que yo había encontrado en Vienna que con mis propias aspiraciones. Mi torpe experimento solo dejo como legado a tres demonios sedientos de sangre pero de gustos refinados. De cualquier manera la ciega furia Jacobina posterior a la revolución de 1789 dio cuenta de un par de ellos. El tercero desapareció, probablemente en busca de tierras más saludables y en donde aun se respetaran las prebendas a las que estaba acostumbrado. Aun no he vuelto a cruzármelo.

No debería alegrarme ya que nuestra especie es tan pequeña en número, pero el mundo no extrañará a estos ignorantes que, teniendo la eternidad por delante solo se preocupan por satisfacer sus más bajos instintos en lugar de acrecentar su sabiduría.Y es así que, en busca de sangre nueva y con renovadas esperanzas vine a estas tierras."

Me di cuenta que permanecía con la boca abierta, mirando obnubilado a este extraño que me había relatado una historia tan increíble que me hacia dudar si estaba despierto o soñando.

"- Y por que a mi?"

"- Y por que no?" me respondió el extranjero "A pesar que en primera instancia no pareces mejor que mis vampiros parisinos, no perteneces a ninguno de los extremos de la escala social y eso mi querido amigo, por ahora me parece suficiente razón a falta de otras mejores!"

"- Me siento agotado, no se que pensar!"

"- Ha sido suficiente por hoy. Mañana continuaremos. Ahora debemos ponernos a resguardo ya que pronto va a amanecer. Sígueme!"

Pasamos a una gran habitación contigua donde, una vez que la luz de las velas inundó el lugar, pude ver en el centro de la misma dos ataúdes.Así comenzó para mí, como lo llamara el extranjero, la noche eterna.

Continuará…

John Doe.

2 comentarios:

Rebeca Romero dijo...

por fin apareciste...

desde la primera entrega que ando bichaeando tu blog, ¿que te paso? una vez cai por accidente en tu blog y desde esa vez que colecciono tus cuentos por asi decirlo, tengo todas las entregas, no se que es lo que mas me gusta si es tu forma lineal y prolija o tu recurrencia en cuanto a los vampiros clasicos.

todavia no te pusiste al día, te apuetos que no soy la unica que espera la otra entrega, me gusto el enfoque que le diste a boris,pero te falta algo, la co portagonista... si esa! la que siempre usa algo rojo y que al final se convierte en la cena de alguno.

John Doe dijo...

Rebeca:
Bienvenida, aunque por lo que decís ya visitás el blog desde hace rato!

Si bien el cuento comenzó (y obviamente volverá a ellos) con una banda de vampiros muy mundanos, era inevitable además de tentadora la idea de retroceder un poco en el tiempo.

En cuanto a la co-protagonista, de hecho ya tenemos una...
pero habrá más!

Vivo disculpandome por lo irregular de mis entregas; es altamente halagador que me reclamen otra más, pero a veces la falta de tiempo o el estado de ánimo incorrecto me impiden sentarme a escribir.
Haré todo lo posible por editar una este fin de semana.

Gracias por tus comentarios!

"Long is the way and hard, that out of hell leads up to light." (John Milton - "Paradise Lost")